lunes, 20 de julio de 2009

Caso Manuel Pinteño: esta es la "justicia" del país de la pandereta

S. ESCRIBANO

El eldense Manuel Pinteño tendrá que seguir entre rejas. La Audiencia Provincial de Alicante ha rechazado la propuesta de la cárcel de Albolote (Granada) para que el reo que más tiempo lleva en prisión fuera excarcelado de forma inmediata después de que se le hubiesen refundido varias de sus condenas a la del motín de Fontcalent de 1990. El tribunal se ha acogido a la petición del fiscal de aplicarle la doctrina Parot para que no se le puedan rebajar los 2.727 días que le corresponden por beneficios penitenciarios (como buen comportamiento) de los 30 años a los que se le refundieron las penas. De esta forma, su excarcelación puede prolongarse hasta 2016.

En 1977 el popular recluso ingresó por primera vez en prisión provisional, pero oficialmente no comenzó a cumplir con sus múltiples condenas hasta 1981 y desde entonces no ha salido en libertad. Sobre él no pesa ningún delito de sangre o agresión sexual, pero sí varios robos. Su mayor pena le llegó hace tres años, cuando se le impusieron 82 años de cárcel, con un límite de cumplimiento de 30 años, por su participación en el motín de Fontcalent. Su abogado, Enrique Botella, solicitó que todas sus condenas se le refundieran con esta última y la Audiencia acordó una unificación parcial. De esta forma, el tribunal estimó que los 30 años de la pena refundida comenzasen a contar desde 1988. Así, su salida se produciría en 2018.

Sin embargo, la cárcel de Albolote hizo números: si se le restan los 822 días que le pertenecen por prisión preventiva saldría libre en 2016 y si además se le rebajan los 2.727 días que le corresponden por beneficios penitenciarios tendría que haber sido excarcelado en febrero de este año. Ante estos cálculos, la prisión propuso a la Audiencia su salida inmediata.Sin embargo, el tribunal provincial se ha opuesto a ello y le aplica la doctrina Parot para que esos 2.727 días de beneficios penitenciarios no se le reduzcan de los treinta años a los que se le refundieron las penas, sino sobre el total de los años a los que ha sido condenado y que superan los cien. Por ello, esta reducción dejaría de afectarle y su salida no se produciría hasta 2016, como explica Botella.

En el auto, la Audiencia cita una sentencia del Tribunal Supremo en la que se reconoce que esta medida "es menos favorable para el reo" y que se trata de "una doctrina, no una ley, con carácter vinculante para otros órganos judiciales". En la resolución se rechaza el argumento propuesto por Botella en el que alegaba que se "vulnera la finalidad de reeducación y reinserción del penado" y el tribunal sostiene que este objetivo "no es el único que ha de perseguirse con las penas privativas de libertad". La Audiencia ha remitido su resolución a la cárcel de Albolote para que vuelva a hacer una propuesta teniendo esto en cuenta, pero siguiendo los cálculos realizados todo apunta a que no saldrá de prisión hasta 2016, como también solicitó el fiscal en su informe.

Sobre esta decisión cabe un recurso de casación ante el Tribunal Supremo. "La decisión atenta a criterios de humanidad"Para Enrique Botella, la decisión de la Sección Primera de la Audiencia demuestra "lo poco que les importa la reinserción y este asunto, del que parece que han hecho una cuestión de honor pese a la opinión de la sociedad, de la cárcel y de otros jueces. Mantener a una persona 40 años en prisión atenta a criterios humanitarios". Fuentes judiciales argumentan que esta doctrina se está aplicando en los casos similares y que no se pueden hacer discriminaciones. Se preguntan qué pasaría si se obvia este criterio y Pinteño vuelve a delinquir a su salida de prisión.

miércoles, 8 de julio de 2009

Mundo de Basura

El mundo siempre sigue adelante. El tiempo avanza. Las sociedades evolucionan. Es una constante. A veces avanzamos poco a poco, a veces los saltos son enormes. La revolución industrial por ejemplo trajo consigo grandes cambios sociales.

Estos últimos años estamos viviendo un nuevo cambio. Todo lo que nos rodea tiene una obsolescencia programada. En las fabricas, las multinacionales crean productos baratos, productos que funcionan por un breve tiempo para pronto terminar en el cubo de la basura. La realidad es que cada vez echamos más cosas a la basura porque cada vez producimos más basura. Ya lo que sale de las fabricas, de las tiendas, es basura.

Esto a afectado nuestras vidas. Nuestra calidad de vida no es lo que era. Los coches se hicieron para viajar más rápido, ahora no solo contaminan nuestras ciudades y el aire que respiramos, si no que han destruido nuestras montañas y bosques. Los teléfonos móviles se crearon como una forma conveniente y portable de comunicación, sin embargo han terminado aislando a la gente, alargando sus horas de trabajo, y esclavizando a la gente que ya empieza a no tener privacidad. Dos amigos caminan por la calle, ambos hablan por el móvil. A pesar de que termino su turno hace cinco horas uno de ellos habla con el encargado del almacén. Tiene que llevar el móvil encendido a todas horas. Siempre tiene que estar en guardia. El otro habla con su esposa. Se verán en media hora con nada que decirse.

Nos desnudamos en internet, en redes sociales, en el móvil. Nos rodeamos de aparatos, ropa, y entretenimiento. Nos deberían hacer la vida más fácil, más sencilla, más llevadera, más feliz, pero la basura nos rodea, nos ahoga, y la diabetes sube enteros y la depresión le sigue a la zaga. Ambas condiciones son ya una epidemia que rápidamente se están convirtiendo en las dos enfermedades más extendidas en el mundo y ambas son consecuencia del basurero en el que hemos convertido nuestro mundo y nuestras vidas.