La entrevista a Fraga recientemente publicada en El Mundo debería dar vergüenza nacional, debería ser un escándalo, sin embargo se asume con naturalidad. Los jueces españoles persiguen los crímenes de las dictaduras de Chile y Argentina, pero en su propio país se callan. Fraga es un monstruo, un torturador, un asesino con sangre en sus manos.
Y ya lo dejo, le he dedicado más lineas de las que merece ese fascista.
martes, 2 de septiembre de 2008
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